“En los dominios de Amazon. Relato de un infiltrado“es quizá un ejemplo más sobre las injusticias actuales derivadas del capitalismo salvaje, como lo son también los casos de Bangladesh y la explotación laboral para grandes empresas del sector textil, o el de China y el silencio ante los suicidios en las fábricas de Apple. Los ejemplos son infinitos por desgracia y, aunque públicos, no parece hacerse mucho para que las cosas cambien. Pero es justo y necesario que se haga público, pues igual sí es posible el cambio en las conciencias individuales. Y eso debió pensar Jean-Baptiste Malet cuando se infiltró como trabajador en los almacenes logísticos de Amazon Francia. Malet relata su pésima experiencia en un ambiente de trabajo cuyas normas y estructuras son muy cercanas a las utilizadas en el Ejército. Una nueva forma de explotación laboral, más cercana a nosotros y más desconocida o encubierta pero que, por suerte, en Francia ha entrado a debate y está dando que hablar. La historia de Malet invita a reflexionar sobre la moral y la responsabilidad social y, mal que nos pese, sobre la causa-efecto de gestos tan comunes y cotidianos como la compra de un artículo por Internet. /Virginia