Quemémoslo, quemémoslo todo. Los recuerdos, los objetos que esconden historias detrás (a veces demasiadas), todo aquello que nos ata al pasado, que nos impide seguir adelante. Hagamos una hoguera y prendamos fuego a todo, dejemos que se consuma entre las llamas. Engañémonos pensando que así seremos capaces de destruir lo que nos hace daño, de olvidar el sufrimiento, de separarnos del recuerdo… O quizá no haga falta el engaño, quizá realmente sirva de algo, quizá el fuego sea capaz de acabar con el dolor, de reducir a cenizas el sufrimiento, de darnos ese empujón para seguir adelante una vez que seamos conscientes de que aquello que constituía el puente entre el mundo físico y el recuerdo, ya no existe. La artista Päivi Koskinen retrata en esta serie de fotografías a varias personas quemando objetos que para ellos eran significativos y cuya destrucción supone, al mismo tiempo, un hecho trágico y renovador, el resorte capaz de activar la superación del dolor, destruyendo lo pasado y actuando como elemento regenerador.
Por: María Arranz
Precios: Gratis
Hora: De lun. a vie. de 16h a 20h y hasta el 19 de Octubre
Lugar: Galería H2O, c/ Verdi, 152