Probablemente, el nombre de Aleksandr Aleksandrovich Volkov no te suene de nada. Pues como muchos niños rusos de su generación, el joven Volkov se quedó fascinado con la hazaña de Yuri Gagarin cuando éste se convirtió en el primer hombre en ser lanzado al espacio y decidió que, de mayor, sería un cosmonauta como su héroe. Y lo logró. Pero más allá de haber cumplido su sueño de la infancia, en 1991, año en que se disolvió la URSS para pasar a convertirse en lo que hoy es Rusia, Volkov y su compañero Krikalev, se encontraban en el espacio dando vueltas a la Tierra. Así, Volkov, abandonó el planeta siendo un ciudadano soviético y regresó a él como ciudadano ruso, convirtiéndose en uno de los iconos del cambio que supuso para el mundo el desmantelamiento de la Unión Soviética. Quizá esa misma idea de cambio profundo pero invisible fue la que inspiró a las creadoras de Cosmonaut Volkov para bautizar su proyecto que, aunque se centra en la moda, se define como un proyecto enfocado hacia el cambio y en el que, además de arte y moda, convergen muchas otras cosas invisibles a los ojos. Iniciativas que nacen en estos tiempos complicados y que además lo hacen con un espíritu positivo y transformador. Cosmonaut Volkov se presenta hoy en sociedad con un showroom muy especial, que pretende transformar el pesimismo y la precariedad en la que vivimos en ilusión y productividad. Ana y Aina son dos estudiantes de Bellas Artes y Moda y también las responsables del proyecto. Hoy nos muestran su primera colección y nosotros nos morimos de ganas por conocerlas y por ver con qué nos sorprenden. ¿Te vienes?