La inmanencia es una palabra que asoma pocas veces en nuestras charlas y que explicaría la fuerza de muchas asociaciones aparentemente imposibles. La inmanencia, aparte de palabra, también es consecuencia artística, el giro formal que un artista como Dennis Hollingsworth se permite tras décadas de exploración de materiales y superficie. Un cambio sutil en su estrategia creativa, o como domar los procesos aleatorios que había utilizado hasta la fecha para ofrecernos un discurso lleno de novedades. Sin abandonar el factor azar, pero sí con suficientes matices de base como para transformar los diferentes niveles de sus obras en formas indivisibles, casi esenciales. Las obras de Dennis Hollingsworth son pequeños mundos que nacen para durar y que podremos disfrutar desde esta misma semana en la Galería Miguel Marcos, con la que el artista también ha desarrollado cierta inmanencia tras sus anteriores y exitosas exposiciones.

Por: Bill Jiménez

Precios: Gratis

Hora: Inauguración jue. a las 20h y hasta 27 de Febrero

Lugar: Galería Miguel Marcos, c/ Jonqueres, 10