Margarit

Stefanos Balis acerca los sabores de su Grecia natal al nuevo bistrot Margarit de Poble Sec. En una ciudad acostumbrada a mantener las distancias con la gastronomía griega, aún tiene más mérito la apuesta del Margarit por una cocina elaborada, auténtica y sabrosa, alejada de tópicos y clichés.

Después de pasar por fogones tan exigentes como los del Pakta o el Rilke, Stefanos se deja acompañar por Jordi Fenoll (ex-Dos Pebrots) para ejecutar con delicadeza recetas que respetan tanto la tradición catalana como la griega, y combinan ingredientes de ambos orígenes con gran sentido común y excelentes resultados. Como prueba su tarama, la skordalia con suquet de gambas, o la caballa a la brasa con cítricos y picada de hierbas. Un billete directo a sabores cercanos, casi reconocibles, pero que al mismo tiempo no estamos 100% familiarizados. El clímax de la comida llegó con un guiso griego de sepia y cebolla perla, y con un excelente cuello de cordero guisado con sumac, que se deshacía en el plato. Además de mimar la comida, Stefanos ha curateado una selección de vinos helénicos accesibles y sorprendentes, que complementan cada plato a la perfección.

El local, flanqueado por una cocina abierta a la sala (máximo ejercicio de transparencia por parte de un chef), ha sido reformado con gusto para tener alma de bistrot. Te ayudará tanto a quedar bien en una primera cita, como a haceros sentir a gusto con un grupo de amigos. Aprovechemos ahora para disfrutar de esta maravillosa introducción a la comida real helénica, antes de que el Margarit se convierta en una de las reservas más codiciadas del Poble Sec.