Desactiva tu supersentido arácnido para vivir más tranquilo

Yo soy muy fan de Spider-man, es mi superhéroe de referencia desde pequeñito y todavía hoy sigo leyendo sus cómics. Peter Parker, el álter ego de Spider-man, tiene unos valores muy interesantes y de los que se puede aprender mucho, aunque eso lo dejo para otro día.

Si no conoces mucho al personaje de Spider-man te puedo explicar que el más importante de sus superpoderes es el sentido arácnido, una especie de sexto sentido que le alerta de peligros unos segundo antes de que se produzcan. Este aviso le permite proezas tales como esquivar balas o saber por dónde le va a venir el ataque del supervillano de turno, todo muy práctico.

Como superhéroe disponer de un sentido arácnido es muy útil y es un factor de vida o muerte para Spider-man en su día a día. En cambio muchas personas tenemos una especie de sentido arácnido que funciona mal y que más que ser útil estorba.

El sentido arácnido

Como tenemos que pelear en tantos frentes y contra supervillanos tan diversos como la calle y sus prisas, llegar a fin de mes, el trabajo y las miles de demandas, parece que tengamos la obligación de estar alerta todo el tiempo; incluso cuando nos vamos a la cama la cabeza todavía sigue en un estado frenético dando vueltas a todo, de ahí la explicación del insomnio de muchos.

Y claro, este sentido arácnido sería muy útil si el peligro fuera real y reaccionar en menos de un segundo fuera asunto de vida o muerte, pero no lo es. Creemos que nos podemos perder algo importante en un momento y por eso miramos tanto el mail por ejemplo, o que pensando en todo lo que puede salir mal de forma continua nos permitirá anticiparnos y que todo vaya bien.

Esto es un regalo de nuestro amigo el cerebro reptiliano que le fue muy útil a nuestros antepasados cuando de repente atacaba un animal y tenían que salir corriendo, pero nosotros no convivimos con peligros reales en nuestro día a día, y sin embargo estamos preparados siempre para ellos, aunque nuestros peligros sean imaginarios y realmente no sean peligros sino cosas que pueden o no salir mal.

Y en vez de ser capaces de esquivar balas con nuestro sentido arácnido lo que hacemos es vivir en una situación de estrés constante, que no solo nos reduce mucho el rendimiento y productividad, sino que nos lleva a estados de ansiedad que no son nada agradables.

¿Y cómo desactivamos nuestro sentido arácnido?

Para desactivar tu sentido arácnido puedes hacer una serie de cosas que te puedan ayudar:

Elimina las fuentes de estrés como por ejemplo mirar el mail mil veces al día. No hay nada tan urgente que no pueda esperar unas horas, y si realmente es tan urgente siempre está el teléfono.
Haz deporte a ser posible a diario ya que tiene muy buenos efectos reduciendo el estrés entre otras cosas.
Haz meditación o yoga para ayudarte a ralentizar la velocidad de tu mente y aprender a no ir tan acelerado.
Haz descansos frecuentemente durante el día. Aunque estés superinspirado estirarte un poco o dar una vuelta por tu casa cada hora te va a venir bien y no te quitará inspiración.
Dale mucha importancia al ocio ya que es tu principal fuente de desconexión mental, sobretodo si es ocio en grupo.
Cuando notes que te aceleras… para durante unos minutos y haz unas cuantas respiraciones profundas, en un momento notarás un gran cambio.

Esta serie de actividades te ayudarán a reducir tus niveles de estrés y a ir desactivando tu sentido arácnido. En algunas épocas será más difícil, pero a la larga tu cuerpo y tu cabeza te lo agradecerán.

¿Qué superpoder te gustaría tener a ti?

 

Ilustración, Ki Ilustraciones

Artículo original, en el blog de Xavi Sánchez