Es el momento de pensar en cómo consumimos de manera más responsable, tenemos un montón de negocios locales que lo están pasando realmente mal, o que directamente se han visto obligados a bajar definitivamente la persiana. Contra viento y marea, Rooftop Smokehouse sigue ahumando delicias en su obrador, dispuestos a recibir visitas y también a entregar a domicilio a quien eche de menos uno de los mejores pastrami, bacon o lonchas de salmón ahumado de la ciudad. Un pedido online que va a hacer más llevadero tu otoño.
Esperamos que en breve vuelva la normalidad y nos crucemos con Buster y Carla en un mercado gastronómico, o podamos salir a cenar a su patio de la Fàbrica Lehmann, uno de los espacios con más encanto que aún nos esconde el Eixample. Entre todos vamos a salir de esta, así que ahora toca colaborar con el comercio local, y hacerles notar nuestro cariño de la forma más tangible.
//fotos Sr Boca