Abisal es un libro sin modelos conocidos, heterodoxo, inclasificable, en donde sigues las cavilaciones de un erudito sobre la poesía que nos rodea, es un ensayo retorcido, un potosí. 713 páginas de una múltiple experiencia entre el ensayo y la narrativa. El libro borbotea en saberes, autores, historias, distorsiones y expectativas
Es un libro que pretende convencerte de que tú mismo eres un compuesto de zonas y figuras. Espacios poéticos donde habitan la fatalidad, la dicha y la luz. Un muestrario de estados del ánimo que aquí se denominan madréporas: la aceleración ligada al terror o la quietud de los tiempos de paz, no sólo son estados emocionales, sino que son asimismo tiempos musicales. La lectura avanza, los temas se superponen, los mundos ambiguos se fusionan y, en medio de ese desconcierto, de esa neblina, estamos nosotros.
«Este libro puede leerse como unos ejercicios espirituales»
Abisal nos ofrece, entre muchas otras cosas, magníficos consejos para convertirnos en mejores lectores. Porque, de fondo, tenemos una invitación para construir nuestro propio esquema. ¿Y cuál puede ser la utilidad? Puede ser un maravilloso camino de autoconocimiento y de aprendizaje literario.
«En el sistema de imágenes que he incluido no hay héroes, por tanto no hay acciones. No he hecho un inventario de tramas, por ejemplo. Todo queda como flotante».
Uno de los fines que persigue la obra es una antología de imágenes que su ociosa memoria atesora, largas horas dedicadas a poetas y artistas de todo rango. Del mismo modo que funde la fantasía con la existencia cotidiana, hace un hueco en su collage: sirve el índice mismo.
El camino es largo y sinuoso. El volumen se lee con el interés que despiertan los libros que exigen un esfuerzo notable de atención por parte del lector.Te cruzas con películas de David Lynch, con las novelas de William Faulkner, el mundo de Delibes, con James Joyce, Unamuno, con Ferrer Lerín, Allan Poe, y Cervantes. Una locura, por momentos divertido, disparatado, paradójico. Una inmersión en las profundidades del arte y la literatura. Una obra rara e inclasificable. Único o, si acaso, parecido.