Hemos escuchado que esta semana es la más fría del año. Se oyen palabras y frases que llevan incrustada la palabra “polar”, o “nieve”, o “lluvia”. La oscuridad alcanza el horario de tarde, transformando nuestros días en jornadas donde reina casi más la noche que el día. En todo este contexto, raro sería ponerse a ver y compartir fotos veraniegas y llenas de color. Nos van más las películas oscuras, las reflexivas e inclusos las tensas, que nos hacen cobijarnos bajo un manta muy gruesa donde el calor no se escapa.

En este escenario fácil de imaginar, también reinan los espectáculos con estas mismas características. Será la grandiosa Sala Beckett la que recoja la obra Asesinato de un fotógrafo, desde el 18 de enero hasta el mismo 19 de febrero, más de un mes de oportunidades para asistir a esta interesante puesta en escena. Escrita e interpretada por Pablo Rosal, el texto acompaña a un detective privado en su investigación que, siguiendo las pistas de una misteriosa nota, va encontrándose con una serie de personajes extraños que comienzan a ser sospechosos del fotoperiodista alemán Franz Ziegetribe. Como se explica desde su sinopsis: “desmantelar un relato es hacer aflorar el funcionamiento de la vida”. El público asistirá a ese proceso de investigación que tanta intriga genera, donde el noir más clásico va marcando su huella.

Es una oportunidad para salir de debajo de esa manta gruesa y olvidarse un rato de la pantalla para asistir a un espectáculo en directo con tintes muy cinematográficos. ¡Esperamos verte por allí!

Por: Guillermina Torresi

Precios: Entre 10€ y 18€

Hora: De mie. a dom. diferentes horarios. Hasta el 19 de Feb.

Lugar: Sala Beckett, Pere IV, 228-232