Alguna vez escuché a la gran Celia Cruz recriminando a un cantante pop que dijo no atreverse a cantar flamenco: “Cosa más grande de la vida, chico, cuando un cantante es bueno está obligado a cantar de todo… Como yo, azúcarrr”. Por ello, mientras más en la sangre se lleve la singularidad (o la originalidad), más posibilidades de aportar en territorio ajeno. ¡Y cómo emociona cuando El Cigala se pone a cantar boleros! ¿No? Su vida intensa y nada sosa, aquella que se nota en los ojos, en los surcos del rostro o, como es su caso, en la voz, termina poniéndonos la piel de gallina. Y, ahora, sumergiéndose en sus raíces, en el flamenco, Dieguito se acompañará simplemente de palmeros, percusión y guitarras para ofrecernos un espectáculo íntimo (como cuando lo ponemos en los altavoces de nuestra habitación para recibir a alguien especial).

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Por: franciscoestrada

Precios: De 18€ a 54€

Hora: 21h

Lugar: Palau de la Mùsica, c/ Palau de la Música, 4-6