Fanfarlo
Los domingos nunca son fáciles de sobrellevar. Dependiendo de cómo haya ido tu sábado, te levantarás a una hora más o menos razonable o directamente pasada la hora de comer, con paso ligero o bien con la vista todavía borrosa. El entusiasmo de tener un día más – ¡un día entero! – antes de volver al trabajo va dejando paso, a lo largo de la tarde, a las primeras punzadas de dolor ante la cercanía del lunes y es entonces cuando empiezas a sufrir por todas aquellas cosas guays que debías haber hecho, pero que al final nunca llegaste a hacer. ¿Lo dejamos para el próximo fin de semana? Venga ya, ¡a la mierda con eso! La noche del domingo todavía es parte del fin de semana, así que basta ya de deprimirse y vete a ver a Fanfarlo; su brillante y barroco pop-rock será el antídoto perfecto para todos aquellos temerosos de la inminente vuelta de esos cinco días de levantarse a las 7 de la mañana. Deja que las animadas melodías y el mareante optimismo de Simon Balthazar te distraigan durante una hora, con una copa en tus manos y unos cuantos amigos a tu lado. TODAVÍA es fin de semana. Y te lo mereces.
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