La cuarentena de David Lynch
Todo esto lo escribo a raíz de una entrevista de Nick Rose que se ha publicado en Vice, y que muchos medios de comunicación han replicado, haciéndose eco de las recomendaciones del director de Twin Peaks, Terciopelo azul, o Corazón salvaje. Lynch y la vanguardia audiovisual, la modernidad en el cine, la nueva narrativa… Todo eso da para mucho, ya lo sabemos; y sin embargo, las recomendaciones del genio de las tramas complejas son de lo más frugales y terrenas.
Según él mismo, David Lynch se levanta y se toma su buen chute de cafeína en formato taza, dice que si no, no funciona. Tras el cambio de estado mental suscitado por lo que -teniendo en cuenta que se trata del director de Inland Empire o el corto What Did Jack Do?, que se puede ver en Netflix- podríamos considerar un brebaje de cualidades extraordinarias. Lynch se dedica a la meditación transcendental, práctica de la que viene haciendo publicidad desde hace años. ¿Y qué es la meditación trascendental? Busquen información al respecto, llegarán a la figura de Yogui. Trascendental o no, la meditación puede ser una buena nueva práctica para esta nueva rutina a la que ya estamos más que acostumbrados. Para David, sin embargo, este tipo de meditación, dice, es la única que ofrece la posibilidad de transcender, ir más allá de nuestro propio cuerpo y de la realidad aparente, de la que poco nos podemos fiar en las cintas del director estadounidense.
La Meditación Trascendental permite al ser humano sumergirse y experimentar una forma eterna de conciencia pura que está dentro de todos nosotros. Por alguna razón, hemos perdido contacto con este campo interno, este nivel no relativo, absoluto y eterno, pero está ahí dentro de todos nosotros.
Aparte de meditar, Lynch se dedica a trabajar en el diseño de objetos en los que la madera y la electricidad son las protagonistas, y en concreto en estos días se dedica a confeccionar y diseñar una especie de lámparas. ¿Cómo serán? Pregúnteselo usted mismo, seguro que la imaginación le lleva a esas lámparas insospechadas que nos gustaría tener como nuevos habitantes de nuestra casa.
Y sí, Lynch tiene consejos sobre el coronavirus, para ti y para mí, pues considera que “por alguna razón estábamos yendo por el mal camino y la Madre Naturaleza ha dicho que ya vale, que había que pararlo todo. Esto va a durar lo suficiente como para cambiar nuestra forma de pensar”, además augura esperanza para un futuro en que “el mundo va a ser diferente, y será un mundo más inteligente”. “Las películas volverán. Todo volverá a la normalidad y de una forma mucho mejor, probablemente.”
Por último, Lynch deja una serie de recomendaciones para el aislamiento entre las que se encuentran dibujar, pintar, construir pequeñas cosas, escribir poemas, escribir historias que sean rodadas después, jugar o inventar juegos. Y concluye: pueden ocurrir muchas cosas en un pequeño espacio, se pueden inventar nuevas recetas y cocinar. Es una oportunidad para muchos experimentos distintos.”
Como ven, recomendaciones de lo más normales para una de las mentes más extraordinarias y creativas del audiovisual. // By Javier Muñoz
https://www.youtube.com/watch?v=3JMdhRspUSQ
