Tormenta de tierra
Conjurar los bramidos primigenios e invocar la catarsis son tareas del poeta. Imponerse frente al caos o ser caos. Intentar asir la realidad por los bordes y darle forma al mundo. Cuando escribes poesía siempre se hace obedeciendo a un orden superior, para tratar de ver la realidad con ojos propios, intentar arrancar territorio conquistado a la muerte. No hay libertad en la poesía, el genio no es libre, libre es sólo lo impasible. Lo que tiene carácter está marcado por el propio sello, condicionado y preso. Lo dice Thomas Mann y no le falta razón, el escribir siempre viene de un estallido, un posicionarse en el mundo.
Por eso siempre es una buena noticia que aparezca un poemario nuevo, que germinen las ideas y se conviertan en frutos. La periodista, actriz y poeta Ale Oseguera nos presenta el miércoles 16 de marzo su libro Tormenta de tierra en el Club Cronopio, donde podremos reunirnos a contemplar cómo echan a volar sus ideas y animarlas para que sigan volando.
