A juzgar por la cola delante del nuevo Compà, Gràcia tenía ganas de probar uno de los mejores bocadillos gourmet de Calabria. Después de cosechar una clientela fiel en La Barceloneta, Vittorio se ha lanzado con su segunda salumeria italiana, ahora en el barrio de Gràcia. De nuevo ha elegido un local diminuto, lleno a rebosar de embutidos, quesos, memorabilia del Cosenza Calcio, y todo el respeto por algo tan humilde como un bocadillo hecho como Dios manda. Compà tiene en stock algunos de los mejores productos del cerdo del sur de Italia: ‘nduja, capocollo, porchetta, sopressata y otras variedades maravillosas de salame picante regional. Vittorio parte con gracia una generosa porción de focaccia, primer paso en el proceso de montaje de tu panino. Empieza untando una espesa capa de crema de olivas, fior di latte o pesto por el interior de tu bocadillo. A partir de allí va sumando estratos de maravillas italianas: mortadella, albóndigas, parmigiana, provola, mozzarella. Tienes nueve combinaciones (más el especial del día) para elegir, o si quieres puedes tunear tu propio panino. Un golpe de plancha deja el pan crujiente y listo para comer. Chinottos, cervezas y vinos italianos acompañan de maravilla la comida del Compà.
Es un gustazo ver cómo disfrutan detrás de la barra, charlando de fútbol mientras rellenan focaccia tras focaccia. Se les nota la vocación por hacer feliz a sus clientes, mimando algo tan modesto como un bocadillo al nivel que lo elevan en el Compà. No retrases más tu visita a una de las mejores paninerías italianas de la ciudad.
