Sueños y secretos de… Clara Soriano

Hemos visto sus viñetas en El Jueves, Mongolia o El Estafador, pero esta vez Clara Soriano publica “Colmado Sánchez” (Ed. ¡Caramba!), su primer cómic en solitario, justo después de recibir el Premio mejor webcómic 2013 del Salón del cómic de Zaragoza por “Caniculadas“, un proyecto a 14 manos con Carla Berrocal, Mamen Moreu, Bea Tormo, Natacha Bustos, Manoli López y Mireia Pérez.

Venid (por favor)“. Eso escribiste en el cartel que anunciaba tu primera firma de cómics en Barcelona. ¿Tan acojonada estabas?
No, pero es que mi primera-primera firma de álbums había sido en Granada y, al ser una ciudad pequeña, quieras que no la gente se involucra más. Pero aquí, en Barcelona, con la de actividades que hay, es más difícil convocar. Nah, puse eso por poner la coña. Estaba con otros dibujantes (cosa que prefiero) y fue muy bien.

¿Te imaginabas así la cosa?
He ido ya a muchos encuentros de cómic… pero reconozco que cuando vi que se acumulaba gente en las firmas me puse un poco nerviosa porque no quería defraudarles dibujando algo feo. Es que los primeros dibujos, hasta que no “haces mano”, siempre son un poco malos.

¿Y las críticas? ¿Pensabas que todas te iban a dejar tan bien?
No, pero yo creo que en España es muy difícil encontrar malas críticas en tebeo. Somos muy pocos y…

Bah, no seas tan modesta.
¡En serio! Las malas críticas solo se hacen en petit comité, porque tampoco quieres joder al autor. Es que esto se hace todo prácticamente gratis, ¿sabes? Pero vamos, que sí, que me han dejado bien y estoy muy contenta. Aunque es una primera obra y hay muchas cosas mejorables.

Este invierno ha sido bueno para ti: el premio del salón de Zaragoza, muchos encargos de ilustración, primer álbum en solitario con guión propio y reseña en El País… hasta que se monta el follón cuando decidís crear la Asociación de Autoras de Cómic, AAC. ¿Fue solo por existir o… qué les dijisteis para que se pusieran así?
Es que antes de eso ya había habido jaleo con el Comicca, un festival que montó una colega en Granada. Era un festival centrado en autoras, igual que puedes hacer un festival solo de manga o solo de dibujantes de Murcia. Y lo que tenía que ser una cosa festiva, cultural y divertida pues… hubo gente que lo criticó. Así que Internet ya estaba “caliente”.

¿Qué “gente” criticó más? ¿Autores? ¿Críticos? ¿Twitteros con mala baba?
No sé, en general. Pero yo creo que vi más críticas de lectores que de autores. Mira, el otro día estuve hablando con un amigo muy anti-grupos de estos, y al final de la discusión le dije: “¡Pero si estamos de acuerdo en casi todo! ¿Qué es lo que te molesta: el nombre?” Y parece que sí. Se quedó pensando… Molesta esa “a” de “autoras”, que algo se nombre en femenino, a pesar de que la asociación esté abierta a hombres. De hecho, que pudieran entrar hombres era una de las primeras normas que pusimos. Es una asociación mixta por la equidad de sexos en nuestro sector, que es el cómic, y que nos sirve para expresarnos y rescatar muchas figuras históricas perdidas.

Todo el mundo parece estar de acuerdo en que tienes mucha mano para relatar lo cotidiano.
Cuando dejé de dibujar para guionistas y empecé con mi Tumblr y El Estafador, lo hacía para mí y hablaba de mis chorradas. Pero empezó a gustar a gente y al final significó mi salto a la profesionalización. Empecé por ahí porque lo cotidiano y lo pequeño es mucho más socorrido. La choni gorda del cómic, por ejemplo, sale de una compañera del instituto. Además, si no te ríes de ti mismo acabas siendo un pedante. No sé, a mí me divierte un montón.

Se nota, eres fresca. Pero hay muchos autores que te cuentan su vida y son más lloricas…
Es que los indis son un poco lloricas. ¡Yo soy más del pueblo! Ja, ja.

¿Con qué sueña una chica tan pragmática como tú?
Con muchas cosas, pero no me gusta decirlas… No, a ver. Pues tengo tres ideas factibles para hacer un cómic un poco más largo (no pienses ahora en una novela gráfica “tocho” de 100 páginas; solo en algo más grande que lo que he hecho ahora) y, bueno, sueño con terminar al menos un guión. Con eso y con poder llegar a fin de mes fácilmente, sin preocuparme de si hay curro o no hay curro. Que con esto de la ilustración…

Pues… ya sabes: “Sueños y se-cre-tos de Clara Soriano”. Estás obligada a contarnos un secreto. Haber elegido susto. 
Uhm, no sé. ¿Qué te suele decir la gente en esta sección?

Tonterías. O explican gajes del oficio. O se salen por la tangente.
Vale, pues yo tengo un sentido nulo de la orientación y me tengo que dibujar mapas para no perderme por Barcelona. Un día, poco después de mudarme a Gràcia, quedé con una amiga por el barrio y me dibujé uno de mis “mapas por si acaso”. Tardé en llegar unos veinte minutos ¡y el sitio estaba en la calle justo al lado de mi casa!

Ehm… ¿Me firmas el cómic?
¡Claro! […] Toma. El dibujo ha quedado un poco marcado porque, como estaba ahí el fotógrafo, no sabía adónde mirar y no he parado de repasar…

www.clarasoriano.com
Foto de Roc Herms