Al clásico Cuina d’en Garriga le ha salido un hermano gamberro con muchas, muchas, muchas ganas de dar guerra. El Sifó d’en Garriga nace como snack bar y complemento de La Cuina (están puerta con puerta), alargando horarios, y con una carta de platitos, vermuts y bocadillos épicos. Pero no se queda solo en eso, es probablemente uno de los bares donde mejor se come actualmente por el centro. Su patata aliñada con sardina ahumada del Cantábrico no tiene nombre, sencilla e impactante. El hummus de guisantes, la soberbia presa ibérica al estilo roast beef o el tartare de salmón con cítricos son pura adicción. Platos tranquilos que parecen sencillos (sólo lo parecen), pero que dejan marca. Del café se encarga una preciosa máquina Marzocco azul cargada de las especialidades artesanas de Nomad Coffee. Una decoración desenfadada y fresca, sin olvidar nunca el muy buen servicio, hacen del Sifó un sitio apto para desayunos, buenos vermuts, picoteo entre horas o quedar bien con amigos o con una cita. Con la misma obsesión por el producto y savoir faire de La Cuina, el nuevo Sifó d’en Garriga (lleva apenas 3 semanas abierto) tiene todos los números de convertirse en uno de los éxitos de la temporada.