Aparentemente nada invita a entrar al restaurante chino Jiaozi, tu nuevo restaurante favorito de gyozas del Eixample. El panorama no es muy alentador: platos de plástico, cajas de servilletas de papel y una lona temporal que tapa el cartel del antiguo restaurante As Vieiras. Pero en el Instagram del Jiaozi hay colgada una foto de Albert Adrià con los pulgares hacia arriba, Pau Arenós les deja por los aires en El Periódico, y te puedes cruzar con Mikel Iturriaga (aka El Comidista) comiendo con amigos. ¿Qué tiene el Jiaozi para convertirse en el asiático de la temporada? Sus 12 tipos de empanadillas caseras, hechas al momento al vapor o a la plancha. Van en raciones de 10 unidades a precios de risa, así que ve con hambre o con refuerzos. Nada de pollo con almendras o ternera con bambú. La carta es auténtica, casera y tradicional de la provincia Liaoning, al noroeste de China. Aquí te pides la ensalada picante de patata, pies de cerdo, oreja con pepino, el redondo de ternera o las mollejas de gallina. Aunque el hit de la casa son sus empanadillas caseras (mójalas en vinagre y salsa picante, insuperables). El servicio es atentísimo y, a pesar de no ser el destino ideal para una primera o segunda cita, el Jiaozi es una de esas perlas escondidas en las que solo entras si te lo recomienda un amigo. Sé valiente, haznos caso y repetirás.
(fotos de Laura Rosal)