Melrose Dumpling House

Nada parece tener sentido en el Melrose Dumpling House hasta que no le pegas un mordisco a una de sus gyozas caseras. Un chef japonés vestido de cowboy, ambientación western y un hilo musical de rock de los 70’s no es lo más habitual para un restaurante japonés. Pero todo se detiene cuando analizas los 12 tipos distintos de empanadillas caseras del menú. Créeme, te costará decidir. Masahiro lo tiene claro y te recomienda las de langostino y cerdo, las de pulpo, y las de cordero (fuera de carta). Sus gyozas caseras son capaces de generar una adicción malsana al nivel de sustancias prohibidas. Épicas, sabrosas: la masa y el relleno son perfectos. Como desafortunadamente no solo de empanadillas vive el hombre, Melrose también ofrece ramen de caldo casero (18 horas a fuego lento, realmente bueno), tonkatsu y brochetas de anguila y de langostinos. Una carta y un ambiente de lo más auténtico si estuvieras en una callecita de Shibuya, pero verdaderamente único e inesperado si estás en Barcelona. Aunque lleva dos años abierto, el Melrose Dumpling House sigue siendo (sin ningún tipo de sentido) un desconocido. Uno de los restaurantes japoneses más sorprendentes y recomendables si eres fanático de la cocina Nipona.