Admito que disfruté desmesuradamente del pollo frito con caviar del nuevo Piel de Gallina. El mix de fritura, yema curada y lata de caviar Siberian Attilus me llevó a un estado de placer peligroso de describir. Uno de los platos más instagrameados de este nuevo chicken bar es un perfecto ejemplo de lo que se quiere conseguir en el Piel de Gallina: ser disruptivos y sorprender con el hilo conductor de un muy buen pollo frito. ¿Ensaladilla rusa de pollo de corral dentro de una bola de pani puri hindú? Por qué no. ¿Una excelente smash burger de pollo? Claro. ¿Albóndigas de pollo en salsa de butter chicken? Lo tienen.
Un viaje por el street food de varios países con el pollo como protagonista de la mayoría de platos. No te saltes la adictiva flor de cebolla frita, el Mac & Cheese trufado o los tacos de chicharrón, libres de pollo pero igualmente recomendables. Pero es con su pollo frito con el que te acaban de ganar el corazón. Piezas de pollo marinado durante 2 horas y al que se aplica una doble fritura para conservar una carne jugosa y un rebozado muy crujiente. Tunea tus trozos de pollo frito con alguno de los 8 acabados de la carta. Desde un sorprendente Valls cubierto de romesco y crujiente de calçot; el potente Seül con salsa coreana gochujang, miel y kimchi; o un delicioso Lima con mayonesa de ají amarillo y maíz chulpe. Si te cuesta decidir, hay un menú de 6 trozos, cada uno con un acabado distinto. Aunque es el Siberia el plato que rompe internet, gracias a sus 20 gramos de caviar, yema de huevo y crème fraîche. Una receta lujuriosa que lleva el foodporn hasta extremos difíciles de concebir.
Una interesante selección de vinos naturales, craft beer, y muy buena sidra artesana hacen de una comida en el Piel de Gallina una experiencia redonda. El nuevo local de la calle Aragó va a ser la flagship dónde van a seguir innovando y rizando el rizo a sus recetas de pollo. Si eres un fanático del pollo frito, prepárate para el viaje de tu vida.