“Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera”. Mientras me adentraba en Pikio Taco advenían a mi cabeza las frases que dan inicio a Comala de Juan Rulfo. Y es que Pikio Taco es un lugar ideal para conectar con México, descansar y degustar los mejores tacos de la ciudad. El local es acogedor y la atención de su equipo os encandilará hasta decir basta. Si volviera a esta tasca mexicana no dejaría de probar su Frozen Margarita de lima o mango para abrir el apetito, ni tampoco su selección de cervezas mexicanas de importación, como la Pacífico o la Modelo. Sus nachos y el guacamole son ideales para compartir, pero yo dejaría hueco para probar su carta de tacos de carnitas de cerdo, rajas, salmón (gran descubrimiento), pollo al pastor, nopal, ternera o cochinita. Y para coronar la experiencia y refrescar el paladar pediría el mousse de limón, crumble de galleta María y ralladura de lima, el postre estrella de la taquería, y brindaría con un chupito de un buen Don Julio Reposado. Buena música, ambiente joven y desenfadado, una decoración chilanga digna del antro más molón de Roma o Condesa. Sé que Rulfo se pasaría por Pikio Taco cuando se aburriera en Comala. ¿Y tú? ¿Te animas a probar unos tacos?