A Punto

No hace mucho escuché decir que en un mundo donde las grandes cosas tienen pocas diferencias, son las pequeñas cosas las que marcan la diferencia. Pues desde este pequeño local de Gràcia se han propuesto hacer del detalle el ingrediente principal de sus platos y ofrecer a sus clientes el privilegio de pedir sin carta y de dejarse asesorar por el propio chef. Cocina tradicional, de autor y unos postres increíbles han ido cautivando a los vecinos de la zona y a los que lo descubren casi por sorpresa. A un lado de los fogones, un chef de lujo formado en las mejores cocinas; al otro, una relaciones públicas que se encarga de que todo esté siempre A punto. Además del servicio de catering preparan platos para llevar y disfrutar en casa. ¿Qué tal unos ravioli de mango para acompañar la peli de este domingo?/ María Arranz